A falta de pocas semanas para el comienzo de la vendimia, las bodegas tienen la vista puesta en conseguir los mejores resultados a pesar de la incertidumbre que cada campaña trae consigo. Imprevistos que surgen cada año y que pueden afectar a la calidad de los vinos.
En este post pretendemos servir de ayuda a todos los enólogos a la hora de plantear la presente campaña a través del conocimiento y el control asociado a la mejora de la gestión de los procesos, la precisión de los tratamientos y la planificación.
La introducción de la Industria 4.0 en el sector vitivinícola facilita la automatización y digitalización, por lo que la instalación de sensores de parámetros específicos mejora los procesos productivos. Esto nos da un conocimiento detallado de las necesidades del vino ayudando a maximizar la atención en la evolución del vino y minimizando las intervenciones necesarias sobre él. La obtención de vinos más naturales no solo es una demanda del mercado, sino que beneficia la calidad de los vinos, de forma que permite trabajar realizando solo aquellas operaciones o tratamientos que mejoran su condición.
El uso de sensores permite la monitorización de ciertos parámetros como es el potencial electroquímico o potencial RedOx, especialmente importante cuando queremos obtener un vino con un perfil aromático muy concreto. Además de conocer con precisión el estado de oxidación (reducción del vino en cualquier momento de la elaboración), podemos trabajar en puntos concretos y críticos para su evolución:
- La gestión de la nutrición se realiza desde otro punto de vista, asociando cada tipo de nutriente a las condiciones de desarrollo de las levaduras y no al consumo de azúcares.
- Los aportes de oxígeno se consiguen ajustar a las necesidades reales del vino y no a protocolos habituales de trabajo que no valoran su efecto en cada vino en particular.
- Se facilita el conocimiento de los procesos y, por ello, su reproducibilidad a lo largo de los años.
- Se valora los beneficios de realizar tratamientos específicos, permitiendo mejorar la gestión de los insumos.
- Todo ello, facilitando la obtención de perfiles aromáticos concretos y buscados por los consumidores.
En este vídeo, Rebeca Lapuente, Consultor Técnica de Grupo Agrovin nos da los detalles de cómo hacerlo con ejemplos prácticos:
CONTROL Y MEDICION DE PARÁMETROS
Grupo Agrovin tiene la respuesta sobre cómo medir de forma precisa tanto el potencial electroquímico de los vinos, como de otros parámetros durante la elaboración, a través de dos sistemas de monitorización como son Tank Control y Electrowine.
TANK CONTROL
Es un sistema fijo multiparámetro que permite la monitorización en tiempo real del potencial electroquímico, así como de otros parámetros a lo largo de la fermentación y la conservación de los vinos.
Gracias a este sistema obtenemos información sobre parámetros como la densidad, temperatura, nivel y potencial electroquímico para que, en función de la información poder acoplar el aporte de oxígeno en cada una de las fases.
Tank Control se puede instalar desde cero o aplicar a una instalación previa de la bodega gracias a labor y asesoría de los técnicos del grupo que hacen un estudio previo para contemplar ambas posibilidades.
Entre sus ventajas destacan:
- Optimizar recursos:
- Optimización de recursos humanos
- Ahorro energético del 35% o 40% en el uso de bombas de remontados y sistemas de refrigeración
- Optimización de recursos materiales. Se usarán los recursos que sean necesarios porque podremos tener una información optimizada del proceso
- Solventar problemas porque podemos prevenir y predecir situaciones que puedan derivar en una desviación
- Reducir contenido de sulfuroso
- Evitar errores
- Mejorar la calidad de los vinos
- Obtener información de cada añada para reproducir los mismos procesos en las siguientes añadas, y tener una misma linealidad y homogeneidad en el perfil del vino
ELECTROWINE
Es un sistema portátil que permite conocer el potencial redox de los vinos en diferentes tipos de envases como barrica o depósito y, además, es posible hacer una gestión del oxígeno a través de la adición del oxígeno y tener un conocimiento sobre qué efecto está teniendo dicho oxígeno en el perfil de nuestros vinos.
Ambos sistemas resultan vitales para controlar y monitorizar los diferentes procesos de elaboración para conseguir un vino de calidad con el perfil deseado, al mismo tiempo que sirven para reducir costes y hacer que las bodegas sean cada vez más responsables y eficientes.
Su instalación resulta muy sencilla y puede acoplarse a instalaciones en curso o planificar su puesta en marcha desde cero gracias a nuestro equipo de ingenieros que se encargan del montaje, puesta en marcha y seguimiento en tiempo real para evitar cualquier imprevisto.
Para más información consulta con nuestros técnicos en emanuele.biondo@agrovin.com